Sentados, Ignacio y Daniel Zuloaga (a la derecha).
De pie, los hijos (Esperanza, Teodora, Cándida y Juan) y su esposa (Emilia Estringana).
Daniel Zuloaga Boneta (Madrid, 1852 - Segovia, 1921)
La faceta de Daniel Zuloaga como pintor también fue muy reconocida y solicitada. En 1908, el Prelado de la Catedral de Segovia le encargó una importante obra: la pintura de una cortina para lucir en la capilla del Sagrario para exhibirse durante la Semana Santa. Esta cortina, de dimensiones considerables (22 metros de altura y 10,6 metros de ancho), se dividía en tres secciones.
En el medio punto, Zuloaga plasmó una alegoría de la creación del mundo, mientras que los paños laterales reproducían "La Cena" de Juan de Juanes y la "Transfiguración del Señor" de Rafael de Urbino.
Durante muchos años, esta impresionante obra fue protagonista de la Semana Santa en la Catedral de Segovia, maravillando a todos los que acudían a contemplarla.
El Adelantado, 12 de febrero de 1908.
Detalle de la cortina pintada por Daniel Zuloaga para la Catedral de Segovia.
En este 1908 Francisco Alcántara dedicó un artículo en El Imparcial elogiando la obra de Daniel Zuloaga en la Escuela de Ingenieros de Minas de Madrid, ejecutada unos años antes.
Artículo de Francisco Alcántara en El Imparcial sobre Daniel Zuloaga.
Con las reformas necesarias para instalar los hornos, el taller en la antigua iglesia de San Juan de los Caballeros comenzó a tomar forma. Los visitantes quedaban fascinados con los cuadros de Ignacio Zuloaga, que retrataban a su tío Daniel y a su familia.
Los albañiles transformaron el Sagrario en un amplio estudio, a la vez que llegaban azulejos en bruto listos para ser pintados por Zuloaga y su hijo Juan. Este espacio no solo albergaba el taller, sino también la residencia familiar, haciendo de estas estancias el lugar de inspiración de los Zuloaga.
Boletín Oficial de la provincia de Segovia, 1 de junio de 1908.
Con los nuevos hornos en funcionamiento, los azulejos de Zuloaga decoran los principales edificios de Madrid, como el Nuevo Café del número 7 la calle Alcalá; un edificio reformado, con una montera de cristal de 12 metros de altura, donde también era habitual jugar al billar, un juego al que Zuloaga era aficionado.
El Adelantado, 8 de enero de 1909.
Nuevo Café de la calle Alcalá.
La obra de Daniel Zuloaga era un éxito, siendo muy demandada en todo el país. En 1909, destaca el encargo del ganadero Félix Urcola: un amplio friso de 25 metros de largo. Esta obra ha sido objeto de un amplio reportaje elaborado por la Asociación Pisano, destacado como "pieza del mes" en diciembre de 2021.
Ese mismo año Zuloaga realizó una obra más conocida, que es la decoración de la pescadería Mardomingo de León, un proyecto que llevó a cabo junto a su hijo Juan Zuloaga.
El Adelantado, 9 junio de 1910.
Pescadería Mardomingo de León con la decoración de Zuloaga.
El famoso pintor Ignacio Zuloaga pasaba los veranos en Segovia en casa de su tío Daniel Zuloaga, lo que generaba la constante visita de personalidades a Segovia para ver la obra de ambos artistas. San Juan de los Caballeros se convirtió en parada obligatoria para todo turista, excursionista, políticos y artistas.
El Adelantado, 21 de noviembre de 1910.
Escena de un bautizo, de Daniel Zuloaga.
El año 1911 comenzó con la inauguración de la
Escuela de Cerámica de Madrid, siendo director el crítico de arte Francisco Alcántara, que ya había escrito varios artículos sobre la obra cerámica de Zuloaga. Para dar prestigio a la entidad, Alcántara propuso como profesores a grandes ceramistas como
Enrique Guijo (profesor de loza en sus tipos nacionales históricos), Daniel Zuloaga (profesor de cerámica aplicada a la decoración arquitectónica) y Eudoro Gamoneda (profesor de fotografía aplicada a la cerámica). Entre los alumnos de la primera promoción se encontraba el talaverano
Emilio Niveiro Romo.
El Porvenir Segoviano, 4 de enero de 1911.
Esta nueva etapa como profesor en Madrid supuso un cambio de residencia durante el periodo escolar, trasladándose toda la familia a Madrid, aunque volviendo cada fin de semana a Segovia, además de los veranos. También, Juan comenzó su formación oficial como ceramista en la fábrica de Sèvres de París.
El Adelantado, 10 de enero de 1911.
El hecho de contar con una residencia en Madrid le permitió participar en exposiciones en el Círculo de Bellas Artes del Palacio del Retiro, primero colectivas, siendo conocido así por el gran público, para pasar después a realizar exposiciones individuales prácticamente cada año. En esta primera exposición también participaron
Ruiz de Luna, Enrique Guijo,
Sebastián Aguado y Emilio Niveiro Gil de Rozas.
Era habitual mostrar la cerámica española junto con los cuadros de Ignacio Zuloaga y las esculturas de Benlliure. La exposición fue visitada por el rey Alfonso XIII y la infanta Isabel.
Daniel Zuloaga recibió la primera medalla entre los ceramistas. También hubo Premios de Cooperación a casas productoras, siendo uno de ellos para "Ruiz de Luna, Guijo y Compañía".
El Porvenir Segoviano, 13 de junio de 1911.
El Pueblo, 17 de junio de 1911.
El Adelantado, 31 de octubre de 1911.
Paisaje, de Daniel Zuloaga.
Las exposiciones en su casa madrileña comenzaron a ser habituales, donde también exponía Juan con su obra realizada en París.
El Adelantado, 21 de abril de 1914.
Daniel Zuloaga en su casa de Madrid.
La Ilustración Artística, 4 de mayo de 1914.
Azulejo de Daniel Zuloaga.
La obra de Daniel Zuloaga representa paisajes y escenas cotidianas principalmente de Segovia, aunque también del resto de poblaciones españolas que visita en verano con su sobrino y su hijo. En el año 1915 hace público su posición política como "republicano de corazón" al comentar la conservación del patrimonio de Segovia.
Extracto de El Porvenir Segoviano, 7 de junio de 1915.
Azulejos de Daniel Zuloaga con la escena de la trilla.
El rey Alfonso XIII, la reina Cristina y la infanta Isabel eran promotores del arte, acudiendo habitualmente a las exposiciones, especialmente de cerámica artística. Muy pocos ceramistas recibieron la visita de la realeza y el taller segoviano fue visitado por la infanta Isabel. La familia real nunca perdió el contacto con Daniel Zuloaga.
El Adelantado, 23 de septiembre de 1915.
El Adelantado, 1 de abril de 1916.
(Exposición en Plaza de Oriente, 7. Madrid)
Azulejos de Daniel Zuloaga con escenas del arado con buey.
En el año 1916 se editó un catálogo con fotografías en color que recogía la completa obra cerámica de los Zuloaga, desde la
Fábrica de La Moncloa y La Segoviana, hasta su taller de San Juan de los Caballeros. Lo editó la Imprenta Alemana y hoy día deber ser una valiosa pieza de coleccionista.
El Adelantado, 17 de marzo de 1916.
La Esfera, 13 de mayo de 1916.
Taller de Daniel Zuloaga en San Juan de los Caballeros, 1916.
Mi tío Daniel y su familia, de Ignacio Zuloaga.
Friso de 9 metros original de Juan Zuloaga.
Premiado con Primera Medalla en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, 1916.
Durante los años siguientes, padre e hijo Zuloaga expusieron sus obras en varias ciudades españolas con mucho éxito y vendiendo toda la exposición. La prensa destacó la exposición de Cádiz y la de Barcelona, esta última en el Salón Parés, donde en 1916 Daniel Zuloaga escribió en primera persona su experiencia de toda una vida dedicada a la cerámica.
Extracto del texto de Daniel Zuloaga.
Jarra de Daniel Zuloaga.
1917 fue el primer año en que las piezas de Daniel Zuloaga se expusieron en América. Destacaron sus tejas y las jarras, de las cuales dijo "No es obra mía: el fuego las hizo".
Diario de la Marina, 5 de junio de 1917.
Y así pasaron los años, entre las clases en la Escuela de Cerámica de Madrid, las exposiciones, las partidas de billar, las corridas de toros, todo ello sin dejar el barro y con toda la familia participando en la producción.
El Adelantado, 28 de mayo de 1919.
Plato de Daniel Zuloaga.
En 1919 Antonio Machado llegó a Segovia para ocupar la Cátedra de Francés del Instituto General y Técnico; frecuentó el taller de su amigo Zuloaga. Se creó la Universidad Popular de Segovia para promocionar el conocimiento y la cultura, con la participación de muchos profesores y conferencias.
También en 1919 hubo una importante exposición con grandes ceramistas españoles en el Círculo de Bellas Artes, donde expusieron Sebastián Aguado, Daniel Zuloaga y Juan Ruiz de Luna, además de las obras de la Escuela de Cerámica de Madrid y las esculturas de Benlliure.
Ejército y Armada, 27 de diciembre de 1919.
Su compromiso con el trabajo, los viajes por España, la producción de nuevas obras y las clases en la Escuela de Cerámica de Madrid continuaron hasta que su salud se lo permitió.
El Adelanto, 18 de febrero de 1920.
Finalmente, en 1921, en sus últimos meses de vida, los reyes de España y el doctor Marañón estuvieron muy pendientes de Daniel Zuloaga.
La Tierra de Segovia, 27 de octubre de 1921.
El Adelantado, 24 de octubre de 1921.
La Tierra de Segovia, 20 de diciembre de 1921.
La prensa nacional escribió multitud de crónicas anunciando su fallecimiento y elogiando su obra artística.
Pasado el duelo, el rey Alfonso XII recibió en audiencia particular a la familia Zuloaga, nombrando a Juan Zuloaga profesor de la Escuela de Cerámica de Madrid y pensionando a las hijas de Zuloaga para estudiar en París.
El Debate, 8 de febrero de 1922.
Las obras de Zuloaga se encuentran repartidas por muchas provincias españolas.
En Madrid, lo primero que viene a la memoria es su obra en la Escuela de Ingenieros de Minas.
Aquí estudiaron mi padre y mi hermano. Y esta obra se comentó en casa muchas veces.
Daniel Zuloaga.
Mis fuentes:
- Biblioteca Virtual de la Prensa Histórica.
- Fundación Zuloaga.
© Septimio Andrés Domínguez.
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Listado de artículos publicados en este blog:
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33. La cerámica de Daniel Zuloaga en La Segoviana. Leer más ...
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