
TRINIDAD SCHOLTZ (1857-1937).
La malagueña Trinidad von Scholtz Hermensdorff fue una mujer de espíritu internacional. Hija de padre prusiano y madre sueca, recibió una esmerada educación en distintas ciudades europeas y llegó a dominar cinco idiomas. Desde joven mostró profundas inquietudes artísticas y culturales, así como iniciativas en la promoción de proyectos artísticos nacionales.
Trinidad Scholtz.
Gran Mundo y Sport, 20 de julio de 1906.
En 1888 Trinidad Scholtz se casó con el diplomático mexicano Manuel Iturbe. Durante varios años, el matrimonio residió en las embajadas de Berlín, Londres, Lisboa, Madrid y San Petersburgo.
El Correo, 18 de diciembre de 1888.
Al menos desde 1901, el matrimonio ya residía en Madrid, donde organizaban suntuosas fiestas aristocráticas en su palacio de Xifré, situado en el Paseo del Prado.
Diario de la Marina, 7 de abril de 1901.
En 1902 el matrimonio adquirió el palacio de Guadalcázar, en la calle de San Bernardo 62, en Madrid. Este edificio, de gran valor arquitectónico, es también conocido como el palacio de los Siete Jardines.
Diario de la Marina, 15 de mayo de 1902.
En 1904 falleció Manuel Iturbe. Trinidad y la hija del matrimonio, Piedad, pudieron continuar viviendo en el lujoso palacio de Guadalcázar gracias al legado de Iturbe.
Diario de la Marina, 11 de diciembre de 1904.
Piedad Iturbe.
Gran Mundo y Sport, 20 de julio de 1906.
La prensa escribía sobre el exquisito gusto de Trinidad para decorar su hogar, con un mobiliario muy elegante. En 1908 la prensa destacó su iniciativa de decorar la sala Murillo del Museo del Prado.
Diario de la Marina, 19 de enero de 1908.
Era habitual ver en Ronda (Málaga) a Trinidad y su hija, en la Casa del Rey Moro. Se la llamaba bienhechora por la creación del "Centro Benéfico Docente de Industrias Artísticas de Ronda", para difundir y dar trabajo local en la elaboración de manufacturas antiguas españolas.
La Correspondencia de España, 4 de noviembre de 1913.
En 1914 Trinidad volvió a casarse. Su marido es el duque de Parcent, razón por la cual se la conocerá a partir de entonces como duquesa de Parcent.
Diario de la Marina, 28 de diciembre de 1914.
En 1921 su hija Piedad se casó en el palacio de Parcent, como ya se conoce a su palacio de la calle de San Bernardo.
La Correspondencia de España, 27 de agosto de 1921.
LA SOCIEDAD ESPAÑOLA DE AMIGOS DEL ARTE.
Trinidad Scholtz es la responsable de la creación en 1909 de la Sociedad Española de Amigos del Arte. Trinidad quiso revivir las industrias artísticas españolas y lo consiguió gracias a la implicación de la Corona y de la aristocracia.
Trinidad Scholtz organizó la Exposición de Antigua Cerámica Española de 1910. Se trata de un esfuerzo no conocido hasta entonces donde se reunieron las mejores colecciones de cerámica en el palacio de Liria, destacando las colecciones de cerámica antigua talaverana de la Infanta Isabel, Adela Crooke, Félix Boix y del conde de Casal. Visitada por Alfonso XIII, este gran trabajo tuvo un merecido éxito gracias al comisariado realizado por Trinidad.
La Esfera, 5 de noviembre de 1927.
Los alfares de cerámica artística de Talavera de la Reina del primer tercio del siglo XX necesitaban una clientela que pudiera asumir los elevados precios de las piezas, recayendo esta función en la aristocracia. Esta exposición supuso la promoción de la cerámica talaverana entre la aristocracia española y, sin duda, hay que reconocer esta labor a Trinidad Scholtz.
En esta crónica de 1916, se cita que la Infanta Isabel visitó en Madrid los talleres de encajes de bolillos creados por Emilia Pardo Bazán, cuyas obras fueron adquiridas por las aristócratas promotoras, donde Trinidad también realizó una importante aportación de tejidos antiguos, que sirvieron de referencia a las alumnas.
Diario de la Marina, 28 de marzo de 1916.
Si la exposición anterior fue importante, la siguiente fue aún mayor por su repercusión nacional y visita de españoles de todas las provincias. Trinidad Scholtz organizó la Exposición del Traje Regional en el nuevo Museo Municipal de Madrid, dirigido por Manuel Machado y cuyo conservador era Enrique Guijo.
Cuatros años le llevó a Trinidad recopilar la prenda de toda España. Finalmente, la exposición se inauguró en abril de 1925, donde destacaron los trajes lagarteranos gracias a la colaboración de Platón Páramo. Se mostraron los trajes de la típica boda lagarterana, los mismos que aparecen en la escena que plasmó Joaquín Sorolla en su obra Visión de España.
Toledo, 1 de abril de 1925.
La exposición fue un éxito rotundo y quizás por lo que se recordará a Trinidad Scholtz en el futuro.
La Rioja, 19 de abril de 1925.
En los discursos de inauguración de la exposición, el conde de Romanones aprovechó la ocasión para afirmar que se aspiraba (se entiende Trinidad Scholtz) a que esta exposición fuera la base para un futuro Museo del Traje.
La Rioja, 19 de abril de 1925.
La Libertad, 8 de mayo de 1925.
La creación del Museo del Traje se retrasó por los problemas que surgieron para buscarle un edificio adecuado. Después llegó la guerra civil. Finalmente se inauguró en 1940, llamándose Museo del Pueblo Español. Será desde 2004 cuando reciba el nombre de Museo del Traje y que, por cierto, guarda en sus fondos una pieza de cerámica artística de Talavera de la Reina, un precioso tintero, del alfar del doctor Henche.
Tintero elaborado por el doctor Henche.
Talavera de la Reina, 1925.
Museo del Traje, CIPE.
LA COMPRA DE LA COLECCIÓN CERÁMICA DE PLATÓN PÁRAMO.
Después de varias conversaciones, en enero de 1921 Trinidad Scholtz llegó a un acuerdo de compraventa con Platón Páramo para la transferencia de su colección completa de cerámica antigua de Talavera de la Reina.
La revista quincenal Vida Aristocrática del 15 de marzo de 1921 publicó un amplio reportaje de tres páginas donde muestra la famosa colección y detalla que está formada por 2.000 piezas.
La crónica muestra varias fotografías de las piezas cerámicas.
La crónica detalla que Platón Páramo, temeroso de que a su fallecimiento la colección se vendiera a diferentes coleccionistas extranjeros, prefirió venderla a alguien que garantizara su unión y su estancia en España.
Reconoce el redactor que se trata de la colección de cerámica antigua de Talavera más completa y valiosa de España. La duquesa de Parcent dispuso la cerámica talaverana en los salones del piso segundo de su palacio de Guadalcázar. Seguro que disfrutó mostrando esta novedad a los invitados a la boda de su hija celebrada en el palacio ese mismo año.
El cronista destaca quiénes son en ese momento los propietarios de las principales colecciones de cerámica española: el conde de Casal, Félix Boix, Francisco de Laiglesia, Guillermo de Osma y, ahora, la duquesa de Parcent.
Las piezas de la colección son de los siglos XVI, XVII y XVIII. Observa el reportero que, ordenándolas secuencialmente, se aprecia perfectamente el periodo de iniciación, su desenvolvimiento, su gran apogeo en el siglo XVII y su decadencia.
La colección cuenta con azulejería del siglo XVII, frisos con asuntos religiosos que decoraron palacios y casas ilustres de Castilla.
EL QUEXIGAL.
Para el abastecimiento del monasterio de El Escorial, se crearon en los alrededores varias granjas, siendo una de ellas El Quexigal (Cebreros, Ávila). Se trata de un edificio del siglo XVI, obra de Juan de Herrera, que contaba con viñedos, olivares y coto de caza para Felipe II.
El Quexigal perteneció a la orden jerónima hasta la desamortización de Mendizábal, pasando a ser propiedad de particulares a mediados del siglo XIX.
En 1928 Trinidad Scholtz adquirió el El Quexigal y realizó una reforma bajo la dirección de Luis Bellido, arquitecto municipal de Madrid. Después, Trinidad lo cedió a su hija Piedad.
Con el paso de los años, Piedad hizo la mudanza de las obras artísticas acumuladas a través de los años en el palacio de Guadalcázar, para ahora formar parte de la decoración de la casa de El Quexigal, incluyendo la colección de cerámica talaverana.
El Diario de Ávila del 4 de diciembre de 1956 anunció un grave incendio en El Quexigal que destruyó las obras de arte.
Beatriz es una de las hijas de Piedad.
La prensa nacional estuvo pendiente del suceso y quedó conmocionada por la pérdida de la colección talaverana. El nombre de Platón Páramo volvió a ser recordado.
El Diario Palentino, 5 de diciembre de 1956.
Libertad, 5 de diciembre de 1956.
LA SUBASTA DE LO QUE SE SALVÓ DE LA COLECCIÓN CERÁMICA.
En 1979 la familia subastó todas las obras de arte rescatadas del incendio ocurrido 23 años atrás. La casa Sotheby's se encargó de realizar la subasta. Los interesados debían dirigirse directamente a El Quexigal del 25 al 27 de mayo.
Sotheby's editó un libro de 135 páginas con las descripciones de los 695 lotes subastados y algunas fotografías, donde "El comprador será el mejor postor, el cual adquirirá el objeto subastado al precio de adjudicación que se señale en el momento del golpe de martillo".
Hay cuatro capítulos: 1) pinturas, 2) mayólica y loza, 3) objetos de arte y esculturas, y 4) muebles y objetos de arte de menor precio.
Entre los lotes de obras subastadas, solamente 74 piezas corresponden a la cerámica talaverana de la antigua colección de Platón Páramo. Esto representa el 4% del total de la colección.
La descripción de cada pieza tiene más valor que las fotografías en blanco y negro. Algunas piezas muestran las marcas del incendio.
Del siglo XVI solo hay platos.
Platos. 34cm.
Talavera de la Reina. Primera época. Siglo XVI.
Decorado en azul. Serie de las mariposas.
Plato.
Talavera de la Reina. Siglo XVI.
Polícroma azul, naranja y manganeso.
Del siglo XVII hay un juego de 12 placas de loza que representa al viacrucis, albarelos, pilas de agua bendita, candeleros con forma de león, platos y jarrones.
Viacrucis. Doce placas de loza. 18x12cm.
Talavera de la Reina. Siglo XVII.
Candelero. Forma de león.
Talavera de la Reina. Siglo XVII.
Plato.
Talavera de la Reina. Siglo XVII.
Polícroma azul, naranja y manganeso.
Plato.
Talavera de la Reina. Siglo XVII.
Decorado en azul. Serie del helecho.
Plato. 22cm.
Talavera de la Reina. Siglo XVII.
Decorado en azul.
Plato. 23cm.
Talavera de la Reina. Siglo XVII.
Decorado en azul y amarillo.
Plato. 40cm.
Talavera de la Reina. Siglo XVII.
Jarrón. 52cm.
Talavera de la Reina. Siglo XVII.
Policromado.
Del siglo XVIII hay placas de loza con motivos religiosos, albarelos, botes de farmacia, candeleros con forma de león y de perro, vacias de barbero, tinteros, saleros, especieros, platos, cuencos, salvillas, jarrones, maceteros, fuentes hondas, chocolateras, jarras y vinagreras.
Jarra. 43cm.
Talavera de la Reina. Siglo XVIII.
Chocolatera. 24cm.
Talavera de la Reina. Siglo XVIII.
Polícromada.
Plato. 37cm.
Talavera de la Reina. Siglo XVIII.
Decorado en azul.
Plato. 25cm.
Talavera de la Reina. Siglo XVIII.
Decorado en azul.
Platos gallonados. 37cm.
Talavera de la Reina. Siglo XVIII.
Decorados en azul y blanco.
Tintero octogonal. 15cm.
Talavera de la Reina. Siglo XVIII.
Decorado en azul y blanco.
Salero. 16cm.
Talavera de la Reina. Siglo XVIII.
Vacia de barbero. 37cm.
Talavera de la Reina. Siglo XVIII.
Serie alcoreña.
Vacia de barbero. 34cm.
Talavera de la Reina. Siglo XVIII.
Candelero. Forma de león. 20cm.
Talavera de la Reina. Siglo XVIII.
Policromado.
Candelero. Forma de león. 14cm.
Talavera de la Reina. Siglo XVIII.
Bote de farmacia. 25cm.
Talavera de la Reina. Siglo XVIII.
Decorado en azul.
Albarelos. 26cm.
Talavera de la Reina. Siglo XVIII.
Del siglo XIX hay jarrones, vacias, platos, salvillas, jarras y lebrillos.
Triste final para la más famosa colección de cerámica antigua de Talavera de la Reina, aquella que sirvió de muestra a Enrique Guijo, Juan Ruiz de Luna y Francisco Arroyo para el revival de la cerámica talaverana.